El puente entre el cuerpo y la consciencia
Respirar es el primer acto de la vida y el último que realizamos al partir. Es el proceso fisiológico mediante el cual el oxígeno entra a los pulmones, pasa a la sangre y llega a cada célula del cuerpo, mientras se elimina el dióxido de carbono, producto del metabolismo.
Más allá del intercambio gaseoso, la respiración es un movimiento que refleja el estado interior de cada ser humano. Cada emoción, pensamiento o tensión corporal modifica el ritmo respiratorio. Aprender a respirar conscientemente significa aprender a dirigir la energía de la vida misma.
Respiración superficial
El reflejo del estrés cotidiano
La mayoría de los seres humanos respira de manera rápida y superficial, con patrones que superan las 15 respiraciones por minuto.
Este ritmo acelerado, propio del estrés, mantiene al cuerpo en un estado de alerta constante.
El oxígeno que llega a las células es limitado, la mente se agita y el sistema nervioso se sobrecarga.
Respirar poco y rápido es vivir en modo de supervivencia.
Con el tiempo, esta forma de respirar puede contribuir a la fatiga, la ansiedad, el insomnio y la disminución de la vitalidad.
Respiración amplia
Símbolo de energía elevada
Una respiración amplia y profunda es señal de una caja torácica flexible y expandida, de músculos intercostales y diafragmáticos activos, y de un sistema nervioso equilibrado
Las personas que respiran lento y profundo lo evidencian en su postura corporal; suelen irradiar seguridad, energía, vitalidad y presencia.
Cuando el aire circula libremente, la energía vital también lo hace. El cuerpo se endereza, el pecho se abre y la mente se aclara.
La naturaleza habla
En la naturaleza encontramos símbolos poderosos de esta verdad. El ratón, el ser humano y la ballena son mamíferos. Entre los mamíferos el ratón es el menos longevo y la ballena el más longevo.
El ratón respira de manera frenética y su vida es corta y ansiosa. Por el contrario, la ballena con una frecuencia respiratoria de apenas unas pocas veces por minuto, encarna serenidad, fuerza y longevidad.
Así, el ritmo respiratorio no solo refleja el nivel de calma interior, sino también el grado de armonía fisiológica y energética de cada ser.
Respiración expansiva
Puesto que en su mayoría el ser humano moderno respira de forma ineficiente, en modo supervivencia y con la energiía en contracción, se llama respiración expansiva al conjunto de hábitos y practicas respiratorias que buscan ampliar la capacidad pulmonar y torácica, liberar emociones bloqueadas y elevar la energía interna.
A través de movimientos conscientes, variados ritmos respiratorios, retenciones, contracciones y enfoques de atención plena; se activa el diafragma, se liberan emociones, se expande la caja torácica y capacidad pulmonar.
Con el tiempo, estas prácticas transforman el modo de sentir, pensar y vivir. Aumenta la oxigenación y la vitalidad celular, se regula el sistema nervioso autónomo, se promueve claridad mental y serenidad emocional, y facilita la transmutación de la energía densa o estancada en energía creadora.
Respirar y Trascender
La respiración no solo oxigena el cuerpo, es también la llave de acceso al reino interior, al espacio sutil, sagrado y trascendental donde habita la calma y la sabiduría.
Al igual que quien aprende a conducir un vehículo, al principio se requiere atención consciente para coordinar cada maniobra —los cambios, los frenos, los espejos, el volante o direccionales—, pero con el tiempo, esos actos se convierten en un patrón natural e integrado.
De manera similar ocurre con la respiración: al comienzo se guía con atención la lentitud, la profundidad, el movimiento del diafragma y otros actos respiratorios; luego, la práctica constante transforma ese acto consciente en un patrón natural de equilibrio, que revitaliza el cuerpo, aquieta la mente y eleva al ser hacia las alturas de lo Divino.
En Mentes Trascendiendo comprendemos la profunda relación que existe entre la respiración y la salud física, mental y emocional. Por ello, es uno de los pilares fundamentales de nuestros programas de formación y desarrollo personal.